Cámaras 3d para poder investigar accidentes desde la oficina, agilizando la apertura de las carreteras


Cuando ocurre un accidente en la carretera, junto con el dramático problema que representa en sí mismo el accidente, existe otro problema asociado, la necesidad de cortar esa carretera durante un periodo de tiempo.

Este problema se complica cuando el accidente es de una gravedad importante, o aparecen implicados varios conductores (con sus correspondientes seguros). En ese caso, el periodo de tiempo en el que la carretera está cortada se alarga mucho más que el necesario para la llegada de los servicios médicos, porque se mantiene cerrado ese tramo de carretera hasta que pueden llegar a la misma los responsables de analizar y peritar el accidente, para poder determinar las responsabilidades correspondientes.

El perjuicio asociado a este tiempo que permanece cortada la carretera es muy grande, tanto desde el punto de vista económico (pérdida de tiempo por desvíos) como de la seguridad.

Para conseguir minimizar al máximo este tiempo, en Inglaterra están apostando por un interesante sistema de escáneres en 3D, que permite a los responsables de tráfico que cuentan con estos dispositivos, tomar una imagen en tres dimensiones del lugar del accidente, para ser analizada posteriormente desde el centro de control. Estas imágenes, que se toman con un ángulo de 360 º, permite a los investigadores tomar medidas, conocer el lugar exacto de cada vehículo o pieza en el accidente, y examinar cualquier tipo de prueba o evidencia de la carretera. Todo esto además, se puede realizar, desde la comodidad del centro de trabajo, sin tener que desplazar personal in-situ a la carretera accidentada, y pudiendo por tanto, despejarla de una forma mucho más rápida.

La estimación de la mejora de tiempo asociada al uso de este sistema es muy significativa. Mientras en la actualidad, ante un accidente grave, la media de cierre de la vía suele ser cercana a las 6 horas, con este sistemas, en unos 40 minutos se podría despejar cualquier carretera, volviendo a la actividad normal.

Una mejora que, sin duda, va a propiciar que pronto veamos estas cámaras o escáneres 3D también en nuestras carreteras.