Autor: César Hinojosa

Los autos locos, la realidad supera de nuevo a la ficción


Seguramente muchos de vosotros recordaréis esa gran serie de dibujos animados llamada «Los autos locos» donde once pilotos con sus coches, a imagen y semejanza de ellos, competían por convertirse en «el piloto más loco del mundo». 

Los propios nombres de estos coches daban una idea muy acertada de sus curiosas características:

  • El súper ferrari.
  • El rocomóvil
  • El espantomóvil
  • El auto/súpero convertible
  • El stuka raduka
  • El compact pussycat
  • El súper chatarra special
  • La antigua blindada
  • El alambique veloz
  • El superheterodino
  • El troncoswagen

Como sucede en muchas ocasiones, en este caso la realidad ha vuelto a superar a la ficción, y os parecían originales y peculiares todos estos coches, no os perdáis el siguiente vídeo en el que su autor da a conocer lo que denomina, con muy buen criterio, «los autos más raros del mundo»

 

 

Masters y cursos de posgrado existentes relacionados con los sistemas inteligentes de transporte y la movilidad

Si hace un par de semanas tratábamos de ofrecer, a grandes rasgos, cómo debería ser el "perfil tipo" de un profesional demandado en la actualidad por las empresas de infraestructuras, hoy vamos a ofrecer un post mucho más concreto, dando a conocer varios masters y cursos de posgrado relacionados con los sistemas inteligentes de transporte, que pueden suponer una formación adicional de un alto valor añadido para todos los interesados en este sector, cada días más importante. [Continuar leyendo]

Una aplicación móvil desarrollada por una niña de 11 años para evitar el uso del móvil cuando se conduce

Que las buenas ideas no están reñidas con la edad de sus impulsores, es algo que en Tecnocarreteras hemos comprobado en varias ocasiones. Si hace unos días dábamos a conocer el sistema para notificar atascos de tráfico uRlate, desarrollado por un joven español de 14 años, hoy nos hacemos eco de una noticia vista en "El Confidencial", sobre una ingeniosa aplicación desarrollada por una niña de once años llamada Victoria Walker. [Continuar leyendo]